La Corte Internacional de Justicia (CIJ) exigió este viernes a Israel que detenga de inmediato su ofensiva militar en la ciudad de Rafah, en el extremo sur de Gaza, y advirtió de que la situación actual derivada de esa operación militar implica un “mayor riesgo de causar un daño irreparable” a los palestinos para evitar un genocidio. En paralelo, las fuerzas israelíes intensificaron sus ataques militares en la Franja, en medio de informes de feroces combates en Jabalia, en el norte de la Franja de Gaza, y una incursión de tanques en Rafah.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ordenó el viernes a Israel detener su ofensiva militar sobre la ciudad de Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, como parte de medidas cautelares destinadas a impedir la crimen de genocidio en el territorio palestino.
En su fallo, la CIJ dijo que «no estaba convencida» de que las medidas de evacuación de Israel fueran suficientes para proteger a los civiles palestinos.
«El Estado de Israel (…) detendrá inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en la gobernación de Rafah, que pueda infligir al grupo palestino en Gaza condiciones de vida que podrían provocar su destrucción física total o parcial», afirmó el presidente de la CIJ, Nawaf Salam.
Además, el Alto tribunal consideró que se daban en estos momentos las circunstancias oportunas para tomar estas medidas contra Israel.
Entre las demás peticiones de la Corte Internacional de Justicia al Gobierno de Benjamin Netanyahu están la urgencia de abrir el paso fronterizo de Rafah para la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, el acceso a los investigadores al enclave palestino y la presentación de un informe en el plazo de un mes que registre el cumplimiento de lo exigido.
La orden fue adoptada por un panel de 15 jueces de todo el mundo en una votación de 13 a 2, con la única oposición de jueces de Uganda y del propio Israel.
La CIJ es el máximo organismo de Naciones Unidas para resolver disputas entre estados. Sus fallos son definitivos y vinculantes, pero han sido ignorados en el pasado. El tribunal no tiene poderes de ejecución.
Israel ha desestimado repetidamente las acusaciones de genocidio del caso como infundadas, argumentando ante el tribunal que sus operaciones en Gaza son en defensa propia y están dirigidas a militantes de Hamas que atacaron a Israel el 7 de octubre.
Un portavoz del gobierno de Israel dijo en vísperas de la decisión del viernes que «ningún poder en la Tierra impedirá que Israel proteja a sus ciudadanos y persiga a Hamás en Gaza».
Se intensifica la ofensiva israelí en Gaza
En paralelo a la decisión de la CIJ, los médicos gazatíes dijeron que al menos cinco palestinos murieron después de que sus casas fueran bombardeadas en Jabalia, y se cree que otros todavía están bajo los escombros, pero el acceso a la zona no fue posible debido a la intensidad del bombardeo.
En la ciudad sureña de Rafah, en la frontera con Egipto, donde la escalada de ataques israelíes llevó a cerca de un millón de personas a huir de la zona, que era uno de los pocos lugares de refugio que quedaban, los residentes informaron de explosiones y humo que se elevaba en el horizonte mientras los tanques avanzaban hacia el barrio de El Geneina, al este de Rafah.
Israel anunció hace meses que sus fuerzas habían despejado Jabalia, el mayor de los ocho campos de refugiados de Gaza. Pero regresaron allí este mes, diciendo que querían impedir que los militantes de Hamás se reagruparan. Los combates se han intensificado en la región en las últimas semanas.
Los residentes dijeron el viernes que los tanques destruyeron el mercado local y las excavadoras continuaron demoliendo tiendas y casas en las estrechas calles de Jabalia. Las Brigadas Al-Qassam, el ala militar de Hamás, dijeron que sus combatientes se enfrentaron allí con tres tanques.
Los tanques también avanzaron cerca del hospital Kamal Adwan, donde los médicos dijeron que el fuego israelí provocó la suspensión de las operaciones en el último centro médico en funcionamiento en el norte de la de Gaza.
Reuers